El despacho Tomarial Abogados, Economistas y Consultores tiene, desde 2017, un Área Contencioso-Tributaria especializada en defender en los tribunales a los contribuyentes frente a la Agencia Tributaria. La litigiosidad en este campo aumenta año tras año por el aumento de la presión fiscal y el consiguiente incremento de impuestos, declaraciones, procedimientos, liquidaciones y sanciones. El consejero delegado de Tomarial, Miguel Ángel Molina, destaca que el porcentaje de éxito de su despacho en estos casos judiciales llega al 75% en el último año y considera que en España hay un grado de indefensión de los contribuyentes frente a la administración tributaria.
– El Área Contencioso-Tributaria de Tomarial nace de la demanda de sus clientes. ¿Cuánto ha crecido tanto la litigiosidad con Hacienda?
– Efectivamente, hemos ido potenciando esta área a medida que ha crecido la necesidad de defensa de nuestros clientes. Según la última memoria anual publicada por la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), relativa al ejercicio 2022, ese año se emitieron más de 517.000 cartas y requerimientos, atendiendo además 35.600 trámites de audiencia y generándose casi 80.000 autoliquidaciones un importe superior a 158 millones de euros. También hubo más de 45.000 liquidaciones por pagos fraccionados de IRPF, Impuesto sobre Sociedades y régimen simplificado de IVA, por un importe de 51,8 millones de euros.
A estos datos de actuaciones de comprobación periódica por los órganos de gestión tributaria debemos añadir las actuaciones propias de la Inspección: por ejemplo, solo en materia de IVA, durante el 2022 tuvieron lugar un total de 392.000 actuaciones. Es evidente que año tras año aumenta la actividad de comprobación por parte de la AEAT y, por tanto, crecen las liquidaciones y sanciones emitidas por la Administración tributaria.
– ¿Por qué cada vez se recurre más a la vía judicial por cuestiones tributarias?
– Además del incremento de actuaciones de control, debemos tener presente que en no pocas ocasiones los motivos de regularización son de índole interpretativa. Existe un margen para ello y la Administración suele realizar una interpretación favorable e “interesada” a sus intereses recaudatorios para proceder a liquidar y/o sancionar al contribuyente. Asimismo, en materia sancionadora, existe un cierto “automatismo” por lo que, ante el menor incumplimiento, la Administración sanciona sin realizar siempre un adecuado análisis del juicio de culpabilidad.
– ¿Cuántos procedimientos pueden gestionar en un año desde esta área de Tomarial? ¿Y cuál es su porcentaje de éxito de los pleitos contra Hacienda?
– Durante 2023 gestionamos un total de 70 expedientes que fueron objeto de recurso y/o reclamación ante los Tribunales. El porcentaje de éxito de los procedimientos que fueron resueltos en este pasado ejercicio, ascendió a un 75% aproximadamente. Es un porcentaje elevado de éxito y estamos satisfechos por lo que ello significa y por la defensa de los derechos de nuestros clientes. En España, hablando en grandes números, un 30% de las liquidaciones y sanciones que se recurren ante los tribunales son estimadas y anuladas bien por defectos de forma o bien por razones de fondo. Por todo ello también cada vez son más las liquidaciones y sanciones objeto de recurso.
– ¿Este aumento es paralelo al aumento de la presión fiscal?
– Indudablemente. A mayor presión fiscal, más impuestos, más declaraciones, más procedimientos, más liquidaciones, más recargos, más sanciones y, por tanto, mayor incremento de litigiosidad. En España se ha ido incrementado la carga fiscal para las empresas y los empresarios deben tener muy en cuenta ese factor en sus planes de negocio, prestando mucha atención a cumplir con sus obligaciones y también a intentar optimizar sus cargas impositivas, dentro de lo que marca la ley. Necesitan un asesoramiento experto y cada vez más especializado.
– ¿Los tribunales están siendo un freno a algunas actuaciones de Hacienda?
– Por suerte, los tribunales jurisdiccionales cada vez moderan y “limitan” más la potestad de comprobación de la Administración tributaria. El Tribunal Supremo ha dictado sentencias muy relevantes en defensa de los derechos de los contribuyentes y acotando las actuaciones de Hacienda en algunos casos.
– Las derivaciones de responsabilidad son una de las cuestiones clave en el aumento de la litigiosidad tributaria. ¿Qué recomienda a los empresarios?
– Nuestra recomendación es que utilicen el asesoramiento preventivo. Que no escatimen esfuerzos en controlar el cumplimiento total de las obligaciones fiscales y contables que les incumben. La falta de información y de control, efectivamente, puede derivar en expedientes de derivación de responsabilidad tributaria por ejemplo a los administradores por las deudas de las sociedades. Eso es un riesgo muy relevante para quienes ejercen la actividad empresarial y recomendamos siempre realizar una práctica preventiva exhaustiva para evitar que tengan que asumir deudas genera la empresa.
– ¿Cree que en el futuro va a seguir aumentando la presión fiscal y el número de inspecciones?
– Por supuesto. Cada año se incrementan el número de comprobaciones y de recaudación tributaria. Por ello es lógico pensar que, durante los próximos años, se incrementará la presión fiscal y seguirá siendo una cuestión capital para la planificación de la actividad de cualquier empresa.
– ¿Cree que hay cierta indefensión por parte de los contribuyentes frente a las actuaciones de la Agencia Tributaria?
– No me cabe la menor duda. Por el mero hecho de que las Administraciones públicas gocen del privilegio de la autotutela ejecutiva administrativa, eso ya sitúa a los contribuyentes en una situación de claro desequilibrio. Por ejemplo, en las actuaciones de recaudación tributaria, como son las diligencias de embargo o apremios, se producen situaciones de indefensión. Esto motiva que los clientes valoren muy positivamente la opción de recurrir al asesoramiento y la defensa de sus intereses por parte de nuestra Área Contencioso-Tributaria.
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